Fundaciones comunitarias
James Magowan: "Las fundaciones comunitarias están bien valoradas en todo el mundo"
Las fundaciones comunitarias se crearon en Europa a partir de la década de 1980. Desde entonces, se han extendido a 22 países, incluida España, y han evolucionado en su forma y función, adaptándose a las cambiantes circunstancias sociales, económicas y políticas. La Asociación Española de Fundaciones (AEF) apoya su constitución con el Programa de apoyo a la creación de fundaciones comunitarias, en colaboración con la Fundación Charles Stewart Mott y el apoyo de la Fundación Daniel y Nina Carasso, para impulsar la innovación y la conexión de actores en el sector fundacional, y las nuevas formas filantrópicas de desarrollo territorial.
El concepto fundamental de una fundación comunitaria implica la organización de personas en una institución filantrópica que aprovecha el tiempo, el talento y el dinero para abordar las necesidades y generar cambios en su localidad. Hoy hay más de 850 fundaciones comunitarias que operan en toda Europa, apoyadas y conectadas a través de redes y asociaciones nacionales y de ECFI (European Community Foundation Initiative).
En esta entrevista charlamos con James Magowan, director coordinador de ECFI para saber más sobre las fundaciones comunitarias.
P- Las fundaciones comunitarias son muy diversas, desde aquellas que operan en un vecindario impulsadas por voluntarios hasta las que trabajan a mayor escala con un equipo de personal profesional. Algunas tienen una importante base de activos financieros o de otro tipo, mientras que otras trabajan recaudando y administrando fondos continuos. Tienen muchas diferencias entre sí pero ¿cuáles son sus similitudes?
R- Entre las características que tienen en común, me gustaría destacar que todas las fundaciones comunitarias son independientes y están gobernados por una junta de ciudadanos que refleja ampliamente las comunidades a las que sirven. Además, buscan construir, con el tiempo, activos y fondos de una amplia gama de donantes, incluidos ciudadanos locales, otras fundaciones, empresas y organismos públicos. Por otro lado, acumulan y despliegan capital en varias formas- humano, financiero, físico, intelectual, social y cultural- para otorgar subvenciones o implementar actividades que aborden una amplia variedad de necesidades en la localidad. Y, además, participan en una variedad de actividades de asociación y liderazgo comunitario, sirviendo como catalizadores, coordinadores, colaboradores y facilitadores para resolver problemas y desarrollar soluciones a los problemas de la comunidad local. Y, por último, es importante destacar que forman parte del tejido institucional filantrópico de la zona, agregando valor a los fondos de los donantes a través de un conocimiento profundo de la localidad y a través de la influencia que tienen en sus conexiones con los demás.
P- ¿Juegan algún papel las fundaciones comunitarias como nexo entre los temas locales y los globales?
R- Sí, proporcionan un vínculo crítico entre los problemas locales y globales. Esto fue evidente durante la pandemia cuando las fundaciones comunitarias, como instituciones y socios locales confiables, estaban bien posicionadas para ser las primeras en responder. De manera similar, con respecto a los ODS y la crisis climática, las fundaciones comunitarias actúan donde lo global se encuentra con lo local y comprenden las intersecciones críticas específicas de cada localidad, por ejemplo, entre el clima y la salud o entre la desigualdad y la producción y el consumo sostenibles.
P- Las fundaciones comunitarias son una importante herramienta de transformación local. Tras los estragos económicos y sociales de la pandemia Covid-19 y la situación económica en España, que es difícil, ¿cree que las fundaciones comunitarias pueden jugar un papel relevante en mejorar la vida de las personas en nuestro país en los próximos años?
Todos nos enfrentamos a múltiples desafíos globales que impactan en la vida de las personas a nivel local y que afectan a la salud y al bienestar, así como a las aspiraciones y perspectivas de futuro. Creemos que, para lograr un cambio sostenible en las comunidades locales, las fundaciones comunitarias tienen un papel importante que desempeñar al construir y utilizar los recursos, convocar y conectar personas y organizaciones y agregar valor a través del conocimiento y la experiencia local. El papel de las fundaciones comunitarias en todo el mundo ha sido reconocido y valorado, en particular durante tiempos de crisis, como catalizadores del cambio. Además, ser parte de un movimiento europeo más amplio ofrece aprendizaje, solidaridad y la construcción de relaciones de confianza a través de las fronteras.
P- ¿Es sencillo el proceso de creación de una fundación comunitaria?
R-Precisamente porque las fundaciones comunitarias se basan en relaciones de confianza entre ciudadanos, grupos comunitarios, donantes, municipios y empresas, no surgen de la noche a la mañana y necesitan tiempo para desarrollarse. ECFI trabaja para fortalecer y promover el movimiento en Europa. Esencial para esto es el papel que desempeñan otros en el ecosistema de apoyo a la filantropía, en particular las 32 asociaciones y redes de fundaciones, que operan a nivel nacional, que pueden ayudar en su establecimiento y desarrollo continuo. Esto ha sido respaldado por el intercambio internacional de conocimientos y una mayor concienciación general sobre su trabajo y potencial.
P- Además de actuar como un centro de conocimiento para el movimiento de las fundaciones comunitarias y facilitar intercambios de aprendizaje, desarrollar capacidades y empoderar a los involucrados, ECFI recopila y coteja información de campo. ¿A qué conclusiones han llegado en el recientemente publicado Fundaciones comunitarias en Europa: Estado de la situación 2022?
El informe presenta los resultados de una extensa investigación de campo basada en consultas con organizaciones nacionales de apoyo en toda Europa. Muestra cómo han evolucionado las fundaciones comunitarias desde España hasta Ucrania, desde Letonia hasta Sicilia, en sus respectivos contextos nacionales. Sirve para demostrar la riqueza de la diversidad en Europa y proporciona información valiosa para quienes desean comprender, apoyar o trabajar con fundaciones comunitarias. El informe ofrece una visión general del campo de las fundaciones comunitarias en Europa junto con perfiles detallados que brindan información sobre el desarrollo histórico y el estado actual del campo en cada país.
El informe señala los desarrollos que ocurren donde la situación de las comunitarias es más extensa y madura, por ejemplo, Reino Unido y Alemania, a través de una mayor capacidad y profesionalidad y en su papel de liderazgo. Hay iniciativas activas de desarrollo en Bélgica, Bosnia y Herzegovina y España que han llevado al establecimiento de nuevas fundaciones comunitarias; y en Albania, Austria y Georgia, se está trabajando para hacer realidad el concepto. Las organizaciones nacionales de apoyo en otros lugares, por ejemplo en Francia, Alemania, Italia, Polonia y el Reino Unido, han indicado potencial para un crecimiento continuo.
El informe destaca que el papel de las fundaciones comunitarias en la respuesta a las crisis, por ejemplo, a lo largo de la pandemia de Covid-19 y la invasión de Ucrania, aunque desafiante y agotador, ha sido particularmente valorado. Se evidencia una mayor colaboración nacional e internacional, consolidando los roles de liderazgo, convocatoria y conexión. Y, si bien no pueden escapar de operar en el presente, hay apetito por mirar hacia un “tercer horizonte”, cambio de sistemas y nuevas formas de trabajar. Lo que es evidente es que el contexto lo es todo y que cada fundación comunitaria está moldeada por las circunstancias históricas y actuales y el entorno operativo en su localidad.
P- Tobias Jung, director del Centro para el Estudio de la Filantropía y Goo Público de la Universidad de St. Andrews, se refiere en el informe a un “caleidoscopio” de filantropía comunitaria, ¿qué significa esta idea?
R- Esto permite una alineación de visiones (relacionadas con conceptos; comunidades y costumbres; circunscripciones y conexiones; capitales y contribuciones; reclamos y críticas) que aportan una visión única que puede ayudar a determinar si una fundación comunitaria podría ser apropiada o viable y contribuir a definir su forma y función.
Nosotros, en ECFI, estamos entusiasmados con el potencial del movimiento de fundaciones comunitarias en Europa, reconociendo que nuestras conexiones pueden trascender las diferencias y reforzar valores basados en la confianza, la solidaridad, la ciudadanía y el compromiso. Esperamos seguir construyendo relaciones en todo el ecosistema de apoyo a la filantropía para garantizar que el valor añadido que pueden aportar las fundaciones comunitarias sea reconocido y utilizado por todos los interesados en una filantropía europea eficaz.