El pasado jueves 19 de enero se celebró en el Congreso de los Diputados una jornada para trasladar a la esfera política y a las Administraciones Públicas la necesidad de avanzar en el diálogo y en la colaboración público-privada para alcanzar una “economía de impacto” organizada por SpainNAB, el Consejo Asesor para la Inversión de Impacto en España; Harmon Corporate Affairs, primera consultora especializada en España en estrategias de no-mercado; y Afi, compañía española líder en consultoría y formación independiente.
En el acto participó el director general de la AEF, Silverio Agea, quien recordó que las fundaciones pueden estar en la inversión de impacto en todo el ecosistema: como inversoras, como beneficiarias y como gestoras. "Las fundaciones deben estar presentes en esta iniciativa pues toda iniciativa que pone a la persona y al planeta en el centro es misión de las fundaciones", aseguró. "La filantropía es una y sólo una que debe agrupar la denominada filantropía moderna, la inversión de impacto, y la filantropía más extendida y tradicional, como las donaciones de personas y de empresas".
Durante la jornada, bajo el título Economía de impacto y Sector Público. Repensando la inversión con el impulso de la Administración, se ha trasladado este nuevo modelo económico al poder legislativo a través de diferentes mesas de diálogo sobre qué es la inversión de impacto y qué retos y oportunidades presenta.
Meritxell Batet, presidenta del Congreso, realizó la apertura del acto, y señaló que “estamos en un contexto en el que la preocupación por la sostenibilidad cada vez es más crucial y atraviesa todos los campos de la acción colectiva. Replantear las lógicas del mercado desde una perspectiva del impacto medioambiental y social de la actividad de las empresas constituye un reto clave para que la economía juegue a favor de la creación de un mundo mejor”. Además, destacó que “las sinergias que se pueden producir entre el sector público y privado en esa dirección es una cuestión de máxima actualidad”. “Desde mi punto de vista, creo que estamos obligados todos aquellos que ostentamos una representación política pero también desde el sector privado a reflexionar y a pasar a la acción lo más rápido posible”, finalizó.
El encuentro reunió a más de 150 asistentes, entre representantes de instituciones públicas, responsabilidades del Gobierno y de los principales partidos políticos, así como personalidades del sector privado y de la sociedad civil. La inversión de impacto se centra en dar solución a los retos sociales y medioambientales, generando un impacto positivo, medible y transparente a través de la utilización responsable, eficaz y eficiente de los recursos disponibles. Para lograrlo, resulta imprescindible reforzar la colaboración público-privada, y que esta impulse la movilización de financiación hacia esa nueva tendencia económica.
Juan Bernal, presidente de SpainNAB y director general de CaixaBank AM, destacó en la inauguración del acto que “la transición hacía una economía de impacto como instrumento transformador no es cuestionable y el sector público tiene un rol fundamental para lograrlo con éxito.” Además, Bernal incidió en que “SpainNAB es hoy una organización multisectorial que cuenta con el compromiso de todos los aliados estratégicos del sector privado y que debemos aspirar a que también sea transversal a todo el arco parlamentario que representan al conjunto de la sociedad española.”
Por su parte, Carmen Basagoiti, presidenta de Harmon, afirmó que eventos como el organizado en el Congreso ayudan a que existan puntos de encuentro entre las diferentes fuerzas políticas y a aportar desde la sociedad civil un ángulo de colaboración institucional. Además, lanzó la petición de que “necesitamos encontrar un impulso y una voluntad firme en el sector público para conseguirlo” y ha concluido que “solo nos faltaba poner en la agenda pública la economía de impacto y hoy hemos evidenciado el primer paso”.
Según el estudio La inversión de impacto en España en 2021, elaborado por SpainNAB y el Esade Center for Social Impact, el capital para la inversión de impacto en España sumó un total de 2.398,6 millones de euros de activos bajo gestión al cierre de 2021, un 12% más que en 2020. Estos datos muestran el potencial del sector en su papel esencial para contribuir a la construcción de un nuevo modelo económico, pero también evidencian la necesidad de seguir incrementando dichos recursos financieros.
La jornada en el Congreso de los Diputados marca el inicio de un año clave para el papel de España en el avance de la economía de impacto, que culminará en Málaga los días 2 y 3 de octubre con la celebración del GSG Global Impact Summit, la cumbre anual de inversión de impacto, organizada por el Global Steering Group (GSG) y SpainNAB.